La visión del 'BIM Manager' y cómo implantar BIM en la empresa

29. junio 2020

Montserrat Carrera es BIM Manager en la empresa de ingeniería y arquitectura Colomer-Rifà. En esta entrevista nos cuenta en qué consiste su trabajo, cómo consiguieron implantar con éxito BIM en la compañía y cómo han ido cambiando desde entonces la forma de elaborar los proyectos y el trabajo en equipo.


¿Cuáles han sido hasta la fecha tus ocupaciones como líder del proyecto BIM?

Primero tomar notas para elaborar un libro de estilo para establecer una línea de trabajo para todos en BIM. Antes de nada, tenía que haber un criterio y comenzamos a elaborar un proyecto base para ir anotando los puntos principales. Hablando de lo estrictamente más necesario, lo primero es que cuánto más 3D y atributado lo puedes hacer todo, mejor. Además, trabajamos para evitar duplicidades. Por ejemplo, si hay un archivo de pilares, pues será el mismo que aparecerá en los planos de cimentaciones, forjados o distribución, con cada pilar modelado en su emplazamiento, con sus acotaciones en layers para poder ocultar cuando no deban aparecer, con los atributos de número de pilar, material, y todos los identificadores necesarios para su emplazamiento, ya sea dentro del modelo como en la parcela. En Colomer-Rifà ya teníamos desde antes de la metodología BIM bastante agrupadas las 3 disciplinas principales: arquitectura, estructuras e instalaciones. Y lo habíamos realizado naturalmente a nivel organizativo porque nos funciona así a nivel interno del despacho. Cuando adoptamos BIM comentamos “es curioso porque ya lo habíamos organizado así”. Era algo natural.

¿Integrar BIM requiere que se haya hecho este ejercicio previo?

Yo creo que se puede empezar igualmente. Nuestra ventaja principal es que nos lo explicaron desde la primera formación en Allplan allá por el año 1997, nos indicaron una idea principal: “lo que tenéis que hacer es estructurar muy bien”, y ahí es donde se debe incidir mucho para que funcione para todos a nivel de un mismo despacho, o ahora trabajando en colaboración. Por ejemplo, en nuestro despacho el seguimiento va desde los que reciben el encargo, los topógrafos, los que realizan el proyecto de propuesta, el de ejecución, que trabajan en paralelo con los calculistas, con los IFC que van y que vienen, instalaciones contra incendios, climatización, iluminación, aire acondicionado, etc., con lo cual, si no lo tienes bien, todos se irán encontrando los mismos problemas. Se trata entonces de realizar un esquema ordenado: ordenar los archivos y establecer una idea del orden lógica y clara, e igual para todos los proyectos, evitando duplicidades, manteniendo los archivos válidos y eliminando todo lo que no sirve.

Esto a nivel interno, ¿de cara al trabajo con diferentes colaboradores y diferentes modelos?

Colaboradores externos hay muchísimos: desde un estudio de arquitectura paisajista que decidirá el diseño exterior, los diferentes industriales que intervienen en la construcción con los que intercambiaremos IFC, empresas de diferentes tipos de maquinaria y estanterías o mobiliario que nos envían su layout, proyectos externos de instalaciones... Pero en Colomer-Rifà la mayoría son los industriales en la fase de construcción. En la propuesta definitiva cuando el cliente dice “perfecto, ya lo veo bien”, suele ser el mismo cliente quien nos facilita el contacto de diferentes industriales, les enviamos las disciplinas correspondientes y ellos elaboran a partir de allí su presupuesto. El cliente decide y asigna quien hará cada parte de la obra, ya que en la obra puede haber una parte de la estructura metálica, otra de prefabricado de hormigón, como también de madera.

Es a partir de aquí cuando abrimos el proyecto en Bimplus e invitamos a los industriales elegidos para contrastar los diferentes modelos. Desde allí ellos mismos se descargan los modelos actualizados - cuanto más aproximados sean tus IFC, no en detalle, pero sí en posición y geometría, mejor y más preciso te lo devuelven -. Hemos llegado al punto de detalle de por ejemplo modelar nosotros unas pletinas aproximadas pero con su posición correcta, que puede ser descentrada del pilar, y que sólo tengan que hacer un pequeño cálculo para ajustar medidas, rigidizadores y pernos, así cuando suben sus modelos IFC de vuelta, ya tenemos el emplazamiento exacto y podemos evaluar las colisiones, donde no se te escapa nada, ni el rigidizador que queda oculto dentro de una placa alveolar por medio cm.

Pero estáis asumiendo un trabajo que antes no teníais que hacer vosotros. Si yo soy un proveedor y ya me dais mi trabajo de cálculo hecho...

Por supuesto que esto fue tema de conversación, y la decisión fue clara: lo vemos como un win-win: tú ayudas mucho al industrial, pero es que principalmente lo haces porque te ayudas a ti. No solo eso, sino que con ellos vas aprendiendo a trabajar con más antelación ya desde la fase de propuesta, y al final te ahorras muchísimo trabajo en los problemas posteriores de todo tipo, pero sobre todo de colisiones en la obra, que al final son responsabilidad nuestra.

¿Qué diferencias ves entre ahora y antes de BIM?

Sobre todo, los problemas en las obras, retrasos y encarecimiento sin control por temas que se han escapado. Se han reducido totalmente. Lo que está bien en BIM está bien de verdad, no es solo un 3D, sino que es el modelo que te da el industrial, del cual es él quien se responsabiliza de que se construya como te ha indicado en su modelo. Tienes la confianza que saldrá todo bien y te puedes ir a dormir con tranquilidad. Reducción de problemas y tiempo. La única ‘inversión’ es el el tiempo dedicado federando los modelos, que resultará en que no habrá ningún contratiempo en la obra: ni se retrasará, ni va a haber problemas de cuestiones que no funcionan, ni tendrás que volver a fabricar piezas porque te has equivocado.

Y para la gente a nivel interno, los nuevos y los que estaban ¿cómo ha sido la acogida?

Depende de cómo se persuade y también de la manera de ser de cada uno. De los que ya estaban, en la mayor parte hubo una muy buena acogida. La cuestión es que se cumpla una directriz: el libro de estilo. Éste indica óptima y claramente cómo trabajar en BIM: desde cómo situar el punto 0 hasta la disposición de los archivos y planos. Ha sido así porque no están solos y tienen a quien consultar. Luego están los que cuesta más persuadir, que no puedes forzarles a un nivel que requiere más habilidad del que están acostumbrados: habrá quien se reciclará, aunque más lentamente, y habrá quien no lo hará, y cada uno debe aprovecharse de sus mejores aptitudes, que si no son las de modelar serán otras, por supuesto no menos importantes, sino que incluso puede que más. Y, finalmente están los nuevos, que además de que suelen ser jóvenes, les encanta tanto el funcionamiento utilizado en la empresa y el libro de estilo, que es imprescindible para entender cómo funciona todo, como también el programa y sus utilidades.

Y con los partners de Colomer-Rifà, ¿ha significado tener que hacer una selección de los que os van mejor?

No, porque casi todos los industriales están trabajando en BIM, además con un LOD bastante elevado, ellos han avanzado muy rápido, puede que más que los mismos arquitectos e ingenieros.

¿Cómo BIM manager, qué tipo de colaborador te cuesta más gestionar bajo la mirada BIM?

Puede que los de instalaciones, porque tienen que trabajarlo más debido a que si trabajas paralelamente y vas haciendo modificaciones, ellos están en la cola y si no se establece un buen sistema de comunicación se vuelve más denso el trabajo. En nuestro despacho han sido los últimos en entrar en este lenguaje y modelo, pero sí que están modelando rociadores, instalaciones de climatización y, sobre todo, instalaciones de automatización de productos químicos y tuberías de fluidos.

¿Cómo estáis gestionando el cambio y las modificaciones entre las diferentes disciplinas?

En Allplan federamos todos los modelos ordenados por disciplinas de los diferentes industriales, con nuestra distribución, muros, cimentaciones, urbanización… y hacemos el análisis de colisiones.

¿Comunicáis de manera manual o directamente en planos?

Reportamos todos los errores detectados en el análisis de colisiones desde Allplan hacia la plataforma Bimplus, donde iniciamos las diferentes tareas para cada industrial indicando el error que hemos detectado, sea de colisión o cualquier tipo de error. Antes lo hacíamos con pantallazos de Allplan y enviando correos electrónicos, pero era muy lento porque era un ir y venir de correos interminables. Ahora, los responsables de proyecto son quienes controlan las tareas tanto en los modelos como en el seguimiento en la obra.

Una vez que BIM ya esté implementado del todo, un equipo ¿de cuántas personas tendría que ser?

Yo creo que tres preguntando cosas a un cuarto. Primero el BIM Manager, que irá a las reuniones iniciales, y además, es quien domina qué quiere el cliente, sobre todo para que no haya problemas con el resultado final de lo que él quiere, por ejemplo con los LOD, porque puedes comprometerte con un LOD 500 que te ha dado una carga de trabajo que no eres capaz de asumir. El BIM Manager debe ser responsable también de los presupuestos y del cierre del proyecto, y enfocado además a la parte legal. Segundo, están los que harán el proyecto con Allplan hasta exportar los IFC hasta los industriales. Y, se mezclará este perfil con el tercero, que realizará la dirección de obra (en el caso que no sea la misma persona que ha realizado el proyecto). Y, por último, alguien de arquitectura, estructura e instalaciones para hacer consultas técnicas.

¿Por qué separar diseño e ingeniería de la obra?

Porque hay mucho detalle que se debe contrastar con la realidad de la obra. Confirmar si el BIM Manager, aconsejado por los técnicos experimentados en el tema, lo decide resolver de determinada manera, para evitar que después no sea más complicado.

Has comentado con anterioridad que utilizáis Bimplus

Por supuesto, una plataforma así se ha vuelto imprescindible para agilizar el flujo de comunicación con los industriales. Además, si el cliente está interesado es un valor añadido. Esta plataforma está mejorando mucho últimamente y aún no hemos visto las ultimas mejoras.

 

¿Ha mejorado la colaboración entre equipos a nivel interno?

Sí, sobre todo a partir del libro de estilo. Trabajar todos en un mismo proyecto en el mismo momento sin tener duplicidades ya lo hacíamos, pero el hecho de tener un proyecto plantilla ha sido el gran cambio.

¿Y de cara a vuestros colaboradores?

Hay industriales encantadísimos. En el proyecto del Centro Comercial de Lloret de Mar, por ejemplo, trabajaban con Tekla y tenían las estructuras de hormigón prefabricadas. Hicimos un aparcamiento que tenía por detrás un terreno topográfico de borde, y se tenía que seguir el perfil topográfico con el forjado porque era un aparcamiento aéreo. Además, había dos aparcamientos más en plantas sótanos. El forjado superior tenía doble inclinación y el inferior también, con lo cual había muchos pilares con muchos emplazamientos y distancias diferentes. Porque si al menos el inferior o el superior hubiesen estado en un mismo nivel habría sido más fácil, pero no fue así.

Con Allplan lo solucionamos fácilmente con planos 3D, y en cambio los industriales no lo podían hacer. Tuvieron que fiarse de nosotros, ponían vigas de pilar a pilar confiando que estuvieran bien todos los emplazamientos de los pilares. Fue un éxito en la obra y además ellos, se presentaron a un concurso y ganaron por la complejidad de lo que habían hecho. Incluso llegaron a plantearse si comprar alguna licencia de Allplan para casos extraordinarios como este. Porque esta estructura la tuvieron que introducir en tantos proyectos como niveles tenía, no podían manejarlo todo junto porque se les colgaba. En comparación, nosotros lo teníamos todo junto: además del resto del proyecto, de sus IFCs importados, cada uno de éstos con sus modificaciones. “¿Cómo puede ser?”, se extrañaban ellos. Esta es la gran diferencia entre un programa multiarchivo como Allplan, y uno que no lo sea, además si tienes un sistema de copias diarias donde puedes recuperar cada uno de ellos por separado mejor.

¿Algún consejo final para abordar un proyecto BIM?

Que se estudie bien y que se tenga claro el esquema. Definir los objetivos y no liarse a hacer cosas que no hagan falta, porque te puedes complicar en tareas que no van a servir para nada. Trabajar solo lo que sea necesario, pero esto creo que te lo enseña la experiencia o un buen análisis. Recuerdo perder el tiempo hace años en modelar una escalera con el módulo “escaleras” solo porque quería verlo en la sección, cuando en aquellos momentos con dibujar un escalón y copiarlo 16 veces era suficiente. Si el modelo no te va a servir para nada, no lo modeles, o haz un sólido rápidamente y atribútalo como una escalera si con el módulo escaleras es demasiado laborioso por su geometría.

¿Qué hubieras hecho mejor?

Hacer el libro de estilo antes y más concreto. Hacer asistentes antes, aún estamos realizando asistentes porque día a día vamos mejorando aún la implantación, creo que nunca vamos a parar porque BIM sigue desplegándose. Tener un buen planteamiento implantado es lo mejor para el trabajo compartido con otros, el famoso trabajo colaborativo.

Desde ALLPLAN agradecemos tu tiempo y dedicación para realizar esta entrevista. Conocer vuestra experiencia en la utilización de BIM es algo de estimable valor para que a otras compañías y profesionales del sector AEC les sirva de referencia e inspiración.

Guía de Implantación BIM en la empresa (BIM office implementation guide)


 

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